Cuando la gente piensa en Seattle, puede imaginarse puntos de referencia icónicos como la Space Needle o el primer Starbucks. Sin embargo, hay una atracción peculiar y sorprendente que se ha convertido en un lugar imprescindible para turistas y locales: el Muro de Chicles de Seattle. Ubicado en Post Alley, cerca del Mercado Pike Place, esta inusual instalación artística se ha convertido en un hito cultural de la ciudad.
El Origen del Muro de Chicles
El Muro de Chicles de Seattle comenzó como una creación improvisada a principios de la década de 1990. Los asistentes al teatro que esperaban en la fila del Market Theater comenzaron a pegar chicles en las paredes de ladrillo, y el acto rápidamente se convirtió en una tradición curiosa.
Con el tiempo, lo que comenzó como un simple gesto creció hasta convertirse en una exposición en expansión de chicles de colores. Ahora, el muro alberga más de un millón de piezas de chicle y se extiende más allá de su ubicación original, convirtiéndolo en una parte única de la escena artística pública de la ciudad.
Una Atractiva Turística Inesperada
El Muro de Chicles de Seattle se ha convertido en una popular atracción turística, con personas de todo el mundo acudiendo al sitio. El muro a menudo se describe como una «joya oculta» de la ciudad.
Los turistas y visitantes no solo se sienten atraídos por el muro en sí, sino por la experiencia inusual y algo repulsiva de ver chicles masticados pegados a los ladrillos. A pesar de que algunos visitantes encuentran la vista desagradable, muchos lo encuentran fascinante e incluso divertido. Las personas agregan voluntariamente su chicle al muro, contribuyendo con su propia pieza de «arte» a esta exhibición en constante crecimiento.
Una Rareza Cultural y Parte del Encanto de Seattle
El Muro de Chicles de Seattle puede no ser para todos, especialmente para los germofóbicos, pero ocupa un lugar especial en el corazón de aquellos que disfrutan de su excentricidad.
Para algunos, la idea de dejar una pieza de su ADN en el muro agrega al encanto del lugar. Muchos visitantes solo quieren ser parte de ello y agregan su chicle a la colección esperando dentro de unos años, encontrar su propia pieza de chicle en este muro.
La Limpieza y su Impacto
El famoso Muro de Chicles de Seattle fue recientemente limpiado por primera vez en 20 años (en 2015), pero como suele suceder, las viejas costumbres mueren difícilmente.
A pesar de la limpieza, no pasó mucho tiempo antes de que el muro volviera a cubrirse de chicles. Algunos visitantes comentaron que no estaban seguros de si el muro realmente estaba limpio, ya que parecía que no lo estaba completamente.
Pronto, muchos se dieron cuenta de que la gente ya había comenzado a pegar chicles nuevamente, y pronto el muro estaría lleno otra vez. La limpieza, aunque breve, solo parecía haber sido una invitación a que más personas dejaran su marca en el muro.
El muro fue nuevamente limpiado en 2019 y 2024. Sin embargo el Gum Wall sigue existiendo como una atracción insólita de Seattle.
Cómo Llegar al Muro de Chicles de Seattle
Baja por una rampa (busca el letrero del Market Theater) a la izquierda de la entrada principal (marcada por un gran letrero de neón que dice «Public Market») del Mercado Pike Place en el centro de Seattle. Al final de la rampa, gira a la izquierda hacia Post Alley y el Muro de Chicles aparecerá a ambos lados.
