Enric , CC BY-SA 4.0 vía Wikimedia Commons
Originalmente construidos por los republicanos durante la guerra, estos bunkers sirvieron como baterías antiaéreas para proteger la ciudad de Barcelona del brutal bombardeo italiano con la táctica de bombardeo de alfombra.
A pesar de su nombre popular, nunca hubo un búnker real en la cima del Turó de la Rovira. En cambio, el sitio albergaba una batería antiaérea y sus instalaciones asociadas.
Los Bunkers del Carmel, situados en la colina conocida como Turó de la Rovira, representan un testimonio silencioso de la historia tumultuosa de Barcelona durante la Guerra Civil Española (1936-1939).
Evolución Postguerra: de Bunkers a Espacio Cultural
Construidos en un período de intensos conflictos, los bunkers cumplían la función de estructuras defensivas antiaéreas para salvaguardar a la ciudad de posibles ataques. Después de la guerra, el área alrededor de los bunkers presenció el establecimiento de uno de los últimos barrios de barracas.
A mediados de 1940 construido en condiciones infrahumanas y sin servicios básicos, el barrio de Los Cañones constaba de 110 barracas y albergaba alrededor de 600 habitantes hasta la década de 1990, cuando antes de los Juegos Olimpicos las últimas barracas fueron demolidas. Estas barracas, ahora rodeadas de casas antiguas, sirven como testamento al desafiante período de posguerra.
A pesar de su origen bélico y su transición tumultuosa, en la actualidad, los Bunkers del Carmel se han transformado en un espacio público y cultural que atrae tanto a residentes como a turistas.
Accediendo a los Bunkers de Carmel
Opciones de Transporte
Llegar a los Bunkers de Carmel puede ser una aventura en sí misma. Mientras que caminar es una opción, especialmente si has explorado el Parque Güell y deseas continuar a pie (a 15 minutos a pie), utilizar autobuses es una recomendación más práctica. El autobús 24 desde el centro de la ciudad, el V19 desde el puerto o el 119 con paradas cerca de las líneas de metro L3 y L5 pueden llevarte eficientemente a la cima de la montaña.
Ruta Alternativa desde la Estación de Metro del Guinardó Hospital de Sant Pau
Para una ruta diferente y accesible, comenzando desde la Estación del Hospital de Sant Pau (Línea 4), puedes disfrutar de la conveniencia de una escalera mecánica y un ascensor para facilitar parte de tu viaje.
Al llegar al estacionamiento, sigue el camino de la izquierda. Vistas espectaculares de la ciudad te esperan mientras asciendes. Las escaleras te llevan a la cima y desde allí, una serie de giros y caminos te guían hacia los bunkers. El recorrido incluye pasar por una casa amarilla reminiscente del estilo de Gaudí y navegar por el barrio de barracas Los Cañones.
¿Qué hacer en los Bunkers del Carmel?
Los bunkers están abiertos al público de forma gratuita con un Horario: 9.00 h a 19:30 h (verano) – 9.00 h a 17:30 h (invierno)
Los visitantes pueden sumergirse en un pequeño museo que relata las experiencias de Barcelona durante la Guerra Civil y la era de posguerra. La exposición está disponible los miércoles, sábados y domingos de 4:30 pm a 7:30 pm.
Al ascender por la colina, los visitantes son recibidos por los restos de los bunkers, que se mezclan armoniosamente con el entorno natural circundante. Una vez en la cima, la recompensa es una vista panorámica incomparable de Barcelona, con los tejados de la ciudad que se extienden hasta el horizonte y los monumentos emblemáticos, como la Sagrada Familia, que se perfilan contra el cielo.
No hay duda de que, al llegar, lo primero que debes hacer es colocarte frente a la ciudad y dejarte envolver por su inmensidad. No olvides tener tu cámara lista, porque este lugar te invita a capturar cada rincón icónico de la Ciudad Condal, y créeme, querrás preservar estos momentos.
