Calle Ocho tiene gallos pintados. Coconut Grove cuenta con pavos reales. Miami Dade College posee su toro robot. Ahora, el centro de Miami presenta un paseo completo de gatos y perros coloridos.
El Dogs and Cats Walkway and Sculpture Gardens es una ruta de esculturas de perros y gatos pintadas en el parque Maurice A. Ferré, justo al lado del Museo de Arte Pérez de Miami. La exhibición de esculturas es permanente y de acceso gratuito.
La pasarela, un polémico y emocionante proyecto, costó a la ciudad 896.000 dólares.
50 artistas locales pintaron 52 esculturas de aluminio de gran tamaño de 26 perros y 26 gatos de diversas razas, cada una representando un vecindario o comunidad de Miami. El objetivo es retratar el papel especial que desempeñan las mascotas en nuestra vidas.
Cada escultura cuenta con un código QR que permite a los visitantes escanear cada pieza y conocer más sobre la raza de cada animal mediante un breve video que presenta al creador y la inspiración detrás de cada diseño.
Dickson, el gato de Little Haiti, tiene una pintura de un pueblo rural haitiano en su costado. Un gato callejero abstracto de Overtown se hace amigo del atigrado naranja de Wynwood. Y luego está Tabaco, un Basset Hound vestido con una camisa de botones turquesa y pantalones cortos con cigarros asomando del bolsillo trasero.
Esta peculiar exhibición de arte tiene sus detractores. Si bien, a los visitantes les ha encantado (como demuestran las reseñas de Google) esta pasarela decorada con animales extravagantemente llamativos, los locales dicen que no respeta el legado artístico existente en la ciudad y no está hecho para la gente que vive aquí.
“Las esculturas de gatos y perros son para los turistas, no para los residentes.”
